El collar de lactancia es una excelente fuente de distracción y relajación cuando las mamás van por la calle con el bebé en el porta bebés. Pueden jugar con él y sentirse menos inquietos.
El collar tiene una nueva y muy agradable utilidad, que es la posibilidad de morderlo. Para cuando los bebés se encuentren doloridos por la salida de sus primeros dientes, este accesorio permite ser usado como mordedor y les alivia esa molestia. Por ello, las mamás pueden ponerse el collar cuando están sentadas y simplemente coger al bebé en brazos para que se calme y juegue con él. Si lo meten previamente en la nevera, estará fresquito y será doble alivio para sus encías.
Con cierre de plástico para poder ser mordisqueado por el bebé y lavado por las mamás.
Sin BPA, PVC, Ftalatos, Cadmio ó Plomo.
Fabricado en España